El poder de los sueños

El éxito o el fracaso de un proyecto muchas veces es una mezcla de ingredientes: estar en el lugar correcto en el minuto preciso, haber sembrado muchas semillas de trébol de cuatro hojas en el camino, tener carisma, creer en lo que uno hace y un pichintún de suerte, también.

Hace varios meses me topé con un sitio bastante inusual: Kickstarter. No lo entendí del todo, pero básicamente se trataba de gente que contaba (a través de un mini video) que quería hacer un proyecto determinado y que necesitaba X cantidad de dinero para poder llevarlo a cabo.
Las personas interesadas donaban dinero; no grandes sumas, pero pequeñas cantidades que se iban sumando. Si el proyecto juntaba en un plazo concreto la cantidad de dinero que la persona necesitaba, el sitio le pasaba el dinero recaudado y el proyecto iba adelante.

Meses más tarde, leí un artículo que hablaba sobre este sitio en la revista de Nuevas Tecnologías del diario El Mercurio. El periodista que lo escribía decía que no podía entender por qué las personas iban a donar desinteresadamente dinero para hacer un proyecto que no los iba a beneficiar de ninguna manera; no los hacía ni socios ni accionistas.
Era tal su desconcierto, que había hablado personalmente con el inventor del sitio y le había preguntado cómo podía ser que funcionara.
Para su sorpresa, no sólo funcionaba, si no que se había hecho uno de los sitios más importantes de la web.

La incredulidad del periodista me hizo sonreir; aún me hace.

No todo en el mundo funciona con la lógica de los hombres de negocios; no todo son acciones y ganancias. Menos mal.

Nunca hay que subestimar el poder de los sueños de una persona.
Es cierto que la gran mayoría de las personas no consigue realizar su sueño en esta vida, pero unos pocos sí que lo hacen. Y eso, aunque parezca increíble, nos hace felices a todos.

Sitios como Kickstarter funcionan porque cuando el sueño de alguien es bueno, es honesto, tiene una historia detrás que te conmueve, a quién no le gustaría poder participar, saber que fue una parte, aunque sea pequeña, de una aventura que llegó a buen puerto?